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Wangay Dorji, capitán de Bután, junto a
Charles Thompson, capitán de Montserrat. |
Este domingo se juega la final del Mundial 2018, a esta altura ya todos sabemos cuando y donde se juega y quienes están involucrados. Pero la historia que les voy a contar tiene poco que ver con una final del mundo, pero mucho a la vez. Hay que retroceder al año 2002. Ni idea que pasó en ese año, pero el 30 de junio se enfrentaron Alemania y Brasil en la final del mundo. Un par de horas antes, se jugó "la otra final". En Timbu, capital del Reino de Bután, se disputó un amistoso entre la selección local y la de la isla caribeña de Montserrat, que en aquel entonces eran penúltimo y último del ranking mundial FIFA.
La historia de como surge esto y se fue dando es fantástica, y está todo en el documental "The Other Final", de origen holandés. Lo que iré contando es una lluvia de spoilers, así que si antes quieren ver la película, pues bien,
aquí la tienen (edit: al link lo bajaron pero si me lo piden se los paso al archivo). Si les puedo contar lo que me costó conseguirla. En Netflix no está. No la encontré por ningún lado para descargar, como si hubiese desaparecido. Pero a veces es necesario empezar por los lugares que uno omite, y si, ¿donde estaba? En YouTube. Partida en ocho videos y sin subtítulos. Me tomé el atrevimiento de bajarlos y pegarlos. Busqué subtítulos en inglés, porque me es mucho más fácil leer dicho idioma que escucharlo. No encontré nada. De nuevo, había que empezar por el comienzo, y un amigo me los consiguió en español (había asumido que no existían). Con los dioses de mi lado (?), los pegué a la película y se los subo (otro atrevimiento que me tomo, por no decir actividad ilegal) para que lo vean. ¿HD? Olvidelo amigo, olvidelo amigo, busquesé otro tonto, amigo. Si ya lo hicieron, o no les interesa, sigamos. Sino los aguanto. Ah, ¿ya está? Bueno, vamos.
Eliminatorias para el Mundial 2002, y los Países Bajos (popular y erróneamente conocidos como Holanda,
basta de esta equivocación) quedaron afuera de la competencia a disputarse en Corea del Sur y Japón. La selección naranja, que venía de ser cuarta en Francia 1998, quedó tercera en su grupo eliminatorio, por detrás de Portugal e Irlanda, y así se condenó. Ante esta situación, dos muchachos holandeses llamados Matthijs de Jongh y Johan Kramer (socios de una agencia de publicidad) se sintieron tan decepcionados que quisieron buscar algo para hacer (?), y decidieron organizar un amistoso entre las dos peores selecciones del mundo. Se fijaron en el ranking, y los equipos eran Bután y Montserrat. Esa es la historia oficial.